Cocinar con nuestros hijos

Uno de los grandes tópicos que ocupa nuestros pensamientos como padres es la comida de nuestros pequeños. Aquí les damos algunas ideas para poder divertirnos con nuestros hijos a la hora de cocinar.

Para algunas familias, la hora de la comida es un tema delicado. Muchos padres nos preocupamos cómo lograr que nuestros pequeños incorporen nuevos sabores y alimentos sanos. Cocinar en conjunto puede hacer que aumente el interés por recetas diferentes, ya que en general los niños son deseosos de aprender.

Al participar activamente en la cocina, los niños generan otro tipo de relación con el nuevo plato o menú. También aumentan la confianza en sí mismo ya que están realizando una tarea de forma responsable y el resultado será degustado por el resto de la familia. Este es un gran suceso para ellos e incluso podemos incorporar a los más pequeños en este proceso.

Lo mejor es realizar esta actividad en conjunto durante los fines de semana, cuando se dispone de más tiempo. Puede ser que la cocina se torne algo caótica, por lo que es importante que nuestros hijos aprendan que después de cocinar hay que ordenar.

También podemos incorporar a los niños a la hora de planificar la comida mirando recetas en libros de cocina y tomando nota de lo qué hay que comprar. Los podemos llevar con nosostros a adquirir los productos y mostrarle cuáles son las verduras y frutas más frescas.

Es importante enseñarles que hay que lavarse las manos antes de comenzar a cocinar. Luego les podemos mostrar cómo lavar una papa y otros vegetales y dejar que lo hagan ellos. Sin embargo, no debemos dejar que los niños utilicen electrodomésticos como licuadoras, hervidores de agua o batidoras, cuando los utilizamos debemos explicarles por qué son peligrosos y que solo los pueden emplear los adultos.

Existen muchos libros de cocina con recetas para niños. En Internet también se pueden encontrar muchas ideas. Cada familia tiene su comida favorita. Si nuestro hijo es selectivo, podemos inventar nuevos nombres para los platos. Al que no le gusta las fresas, no le va a gustar la compota de fresa. Pero tal vez “La salsa de fuerza superpoderosa” le agrade y de esta manera se sume a la lista de los nuevos platos favoritos.

La comida ya está lista, nuestro hijo puede elegir las servilletas, poner la mesa y decorarla. Lo único que resta es sentarse y disfrutar. ¡Buen provecho!