La estimulación que necesita un niño
Publicado el: 30 noviembre, 2017
El concepto de que los niños se desarrollan mejor si son estimulados de manera temprana e intensiva no es del todo cierto, hay factores que deben ser tomados en cuenta y que nos conducirán a elegir que es lo prioritario “para este bebe y su mamá”. De manera general podemos decir que casi todos los bebes traen consigo una capacidad interna, una energía interior, para irse desarrollando y que los padres deben estar pendientes de cómo se van dando estos procesos pero no deben estar constantemente ocupados activamente en que su bebe haga tal o cual avance. Lo que sí deben conocer es que el bebe se desarrollara por sí solo si se han tomado en cuenta las necesidades físicas y emocionales del mismo, brindando bienestar por un lado y por otro permitiendo que el bebe haya tenido suficientes experiencias en su entorno preparado para que estos estadios del desarrollo se den lugar. No se trata de “enseñar algo” al bebe, sino más bien de crear o incentivar la alegría y curiosidad tanto para la motricidad, el lenguaje y el juego.
Para cada etapa hay un punto de referencia que nos guiará para saber qué capacidad ha adquirido y partiendo de esto con mucha repetición de la actividad que adquirió entonces estará listo para la siguiente fase. ¿Cómo saber si el bebe está listo para la siguiente fase? El bebe nos lo demostrará con su comportamiento. Además hay que tener presente que cada bebe tiene su tiempo y su propia manera de ir desarrollándose, esto quiere decir que debemos tener respeto por la individualidad, cada bebe se diferencia de otro, tiene su propio ritmo y su manera que lo hace irrepetible. Vale también recalcar que así como hay periodos de estimulación también deben existir periodos de descanso.
Podemos decir sin lugar a dudas que la tecnología o pantallas no son estímulos adecuados que tranquilizarán a un bebe sino todo lo contrario, estamos estimulando el Sistema Neuro-Sensorial del bebe, lo que ocasionará que se irrite más. Los estímulos aconsejables son los reales o naturales, como escuchar la suave voz de la madre que le habla o canta mientras lo alimenta y/o cambia de pañales acompañado de suaves caricias. Estos estímulos promueven que el bebe sienta tranquilidad, seguridad, calma, bienestar físico y emocional.
Autor: Dra. Patricia Ordóñez Legarda:
Doctora en Medicina. Directora del Centro Kinderzentrum (Ecuador). Formación en Pedagogía Waldorf.
Su trabajo primordial es el campo del diagnóstico temprano y oportuno de alteraciones en el desarrollo con la subsecuente intervención interdisciplinaria de las diversas áreas terapéuticas que brinda la fundación.