La habitación de mi bebé
Publicado el: 15 febrero, 2018
¡Deja volar tu imaginación! … recicla todo lo que tengas, investiga y ponte a trabajar para decorar la habitación de tu bebé. Es una de las tareas más bellas y divertidas. No tengas temor si tus recursos económicos no están pasando por su mejor momento ya que también podemos hacerlo sin gastar un dineral.
Dos objetivos principales nos guiarán en esta tarea: el cuarto debe quedar bonito, pero lo más importante es que sea seguro. Nuestro niño pasará en él mucho tiempo y tu debes estar tranquila que no hay ningún elemento peligroso en su habitación.
Consejos prácticos:
¡Las experiencias de otros padres siempre son de gran ayuda! Únete a algún grupo de whatsApp, familiares o amigos que tienen hijos podrán recomendar los productos que realmente dan resultado. Conversa con otras madres, ellas te contarán el resultado que obtuvieron con algunos productos que parecían geniales y resultaron inútiles.
Recicla viejos muebles. Puedes hacerlo tú misma o contratar a un carpintero, lo importante es rescatar esas pieza que tienen una historia en tu vida y darle tú misma un nuevo aspecto, tal vez simplemente necesite un poco de pintura, un nuevo color.
¿Dónde guardar los productos de higiene del bebé? Puedes usar alguna caja que ya tengas o compra canastas que quedan súper lindas y son muy económicas.
Lámparas y veladores pueden ser siempre intervenidos por los papis con mucho amor. Cambiar la pantalla, crea diseños con botones, cintas de colores, lazos o cualquier otro adorno que te guste, es posible. Puedes utilizar algún pegamento o una pistola de silicón, la cual es una excelente inversión si te gustan las manualidades.
Consulta revistas de decoración de todos los tiempos; podemos tomar ideas de cuartos infantiles de todas las épocas. Puedes tener una carpeta y recortar las fotos que te interesen; guárdalas para crear tu propia guía y seleccionar todo lo que te interese. Será tu carpeta una fuente de inspiración para encontrar soluciones originales e ideas diferentes.
Un tema a tener en cuenta es el espacio del que dispones. No calcular bien lo que cabe en la habitación de tu niño es un error que frecuentemente comenten los papás y que podría costar caro. Es primordial que tomes las medidas de cada pared (incluyendo la posición de las puertas y ventanas) y dibujes un plano completo. Todo lo que veas y te guste puede ser adaptado a tu estilo y al espacio que tienes.
Aquí otras ideas:
Puedes enmarca una foto, grabado, dibujo o cualquier imagen que te encante y que consideres que puede quedar muy bien en la pared del cuarto del bebé.
Confecciona una cortina de voile; son telas muy finita que aporta ligereza y sofisticación al ambiente. Son económicas y fáciles de lavar.
Realiza tú misma un móvil para la cuna.
Las paredes pueden ser el mejor lugar para jugar, pintar un mural es una tarea más sencilla de lo que imaginas si eliges algún dibujo simple que puedas pasar a la pared. Hay muchos tutoriales en Internet que te enseñan paso a paso cómo hacerlo. ¡Anímate!
Encuentra colores o nuevas texturas para pintar las puertas de la habitación.
Deja en libertad a la imaginación y no tengas miedo de crear. ¡Inventa tus propias ideas al decorar el cuarto de tu bebé!