Lesiones transitorias en la piel del recién nacido

Nuestro bebé se encuentra dentro de un saco (placenta) rodeado de líquido amniótico. En el momento de nacer, la piel queda en contacto directo con diferentes elementos como: ropa, cobijas, toallas, entre otros, a los cuales debe que adaptarse. En ocasiones se observa la presencia de lesiones en la piel del bebé, que en su mayoría son transitorias, benignas y con una evolución limitada a las primeras semanas o meses de vida.

En la mayoría de los casos estas lesiones no requieren tratamiento, pero es fundamental su reconocimiento en el diagnóstico para que los padres estén más tranquilos y se eviten tratamientos innecesarios.

¿Cuáles pueden ser las lesiones?

• Eritema tóxico: aparecen entre el primer y tercer día de vida, aunque puede ser tardíamente hasta 3 semanas después. Son lesiones semejantes a un granito de color blanco amarillento rodeado de un círculo rosado. Pueden estar en cualquier parte del cuerpo, pero casi siempre respetan palmas y plantas. Puede durar varios días o semanas. Esta lesión no requiere tratamiento,  no presenta otro síntoma asediado y desaparece de manera espontánea.
• Miliaria: conjunto de pápulas (ronchas) de color blanco perlado o amarillento de 1 a 2 mm de diámetro y en los lugares que más se presentan son las mejillas, la frente y la barbilla. Normalmente, se resuelve espontáneamente en el lapso de un mes. Posiblemente puede ser secundario a  exceso de calor y abrigo. Use ropa fresca, preferiblemente de algodón, no use ropa sintética y si es posible, refresque al bebé con un baño dos veces al día, mantenga la habitación ventilada (fresca) y no aplique cremas o aceites.
• Manchas mongólicas, de Baltz o mancha azul: es un lunar localizado en la región lumbosacra (espalda y pelvis), el cual se puede extender hacia la zona glútea o incluso hasta los hombros, pudiendo aparecer, aunque de forma infrecuente en otras localizaciones de las extremidades y la cara. Estas manchas se encuentran desde el momento del nacimiento y van desapareciendo gradualmente en los primeros años de vida, aunque en algunos casos puede persistir durante la infancia y hasta la edad adulta.
• Acné neonatal: se caracteriza por un conjunto de granitos con pus o simplemente colorados, que se localizan en las mejillas, la frente y el mentón. Habitualmente se resuelven  espontáneamente durante el primer mes de vida, pero en algunos casos puede persistir durante más tiempo. En algunos  recién nacidos se puede observar descamación  localizada en las muñecas, dorso de las manos, pies, y en algunos casos en el tórax.  Esta lesión puede aparecer dentro del primer y segundo día de vida, lo cual se considera normal. No requiere tratamiento y desaparece  espontáneamente entre  la tercera y cuarta semana de vida.
• Hemangiomas planos: en la mayoría de los recién nacidos se puede percibir manchas de color rosado, pálidas, localizadas en la región central de la frente, párpados, labio superior y en la nuca. Estas son lesiones vasculares que persisten durante algunos meses y luego durante el crecimiento del niño desaparecen.

Escrito por: Verónica Mera – Pediatra de la Fundación Valle del Lili