¿Cómo mantener la disciplina durante el periodo de pandemia?
Publicado el: 27 abril, 2020
Enseñarle con calma a los niños un buen comportamiento puede ser difícil, aunque no menos importante durante los tiempos de pandemia. Las escuelas están cerradas y muchos padres están trabajando en casa o se están enfrentando a periodos de incertidumbre con respecto a la situación laboral. Ahora es importante practicar estrategias positivas y sanas para la crianza y la disciplina de nuestros hijos.
Consejos basados en la Sociedad Americana de Pediatría:
- Prevenga el aburrimiento: la vida de los niños ha cambiado, no pueden jugar con sus amigos, no van a la escuela y pueden aburrirse. Los niños aburridos o frustrados tienden a portarse mal. Trate de mantenerlos ocupados en casa con una rutina de actividades sanas.
- Establezca límites: aplique reglas que sean claras y coherentes que sus niños puedan seguir. Cerciórese de explicar estas reglas en términos apropiados para la edad que ellos puedan entender. Con los niños mayores, trate de darles la oportunidad de participar con algunos límites que se van a manejar, así los respetarán.
- Determine consecuencias: explique de forma calmada pero firme, las consecuencias de no comportarse bien. Por ejemplo, dígale que, si no recoge sus juguetes, usted los guardará y no podrá jugar con ellos el resto del día. Manténgase listo a cumplir lo establecido de inmediato. No se dé por vencido, devolviendo los juguetes después de unos minutos. Sin embargo, recuerde, que no debe quitarle algo a un niño que realmente necesite, como por ejemplo la comida.
- Haga uso de pausas obligadas: esta estrategia para la disciplina funciona mejor cuando se les advierte a los niños que si no dejan de comportarse mal, los tendrá que poner en pausa obligada. Recuérdele qué fue lo que hicieron mal con pocas palabras y sin mucha emoción, tanto como le sea posible. Sáquelos de la situación donde se encuentran por un tiempo determinado (un minuto por cada año que tengan es una buena guía).
- Reoriente el mal comportamiento. Algunas veces los niños se portan mal porque no saben qué hacer y necesitan de alguna orientación. Encuentre una nueva actividad que su niño pueda hacer.
- Hable con sus hijos sobre los temores que tienen: los niños con edad suficiente para escuchar las noticias pueden estar atemorizados de pensar que ellos o sus padres van a morir. La investigación médica sobre el COVID-19 revela que las personas saludables menores de 60 años tienen menos probabilidad de enfermarse gravemente o de morir; por tal motivo, hable con los niños sobre cualquier noticia alarmante que escuchen.
- Entienda cuándo no hay que responder:mientras que su niño no esté haciendo algo peligroso y esté recibiendo suficiente atención por buen comportamiento, ignorar el mal comportamiento también puede ser una forma eficaz de frenarlo. Ignorar el mal comportamiento también puede enseñarles a los niños que sus acciones tienen consecuencias.
- Elogie lo que hacen bien: los niños necesitan saber cuándo han hecho algo mal y cuando han hecho algo bien. Coloque atención al buen comportamiento y comuníqueselo, elogie lo que hacen bien. Esto es importante, especialmente durante estos tiempos difíciles, cuando los niños están apartados de sus amigos y sus rutinas normales.
- Separe tiempo para prestarle atención a su hijo: la estrategia más poderosa para disciplinar de forma eficaz es la atención, para reforzar el buen comportamiento y disuadir los otros. Una comunicación clara puede ser de gran ayuda.
- Cuide de sí mismo: las personas a cargo de los niños deben cerciorarse de cuidar de sí mismos, de su salud física y mental: comer bien, hacer ejercicio y dormir lo suficiente, así como de encontrar maneras de relajarse y tomar tiempo para descansar. Si ambos padres están en casa, tomen turnos para vigilar a los niños cuando sea necesario.
- Evite el castigo físico: el castigo físico puede aumentar la agresión en los niños a largo plazo y no les enseña a comportase bien o tener autocontrol. El castigo físico puede quitarle la sensación de seguridad y protección en el hogar.
- Tome un respiro: recuerde que, como padre de familia, puede también tomarse una pausa obligada cuando se siente fuera de control. Asegúrese de que su niño está en un lugar seguro y dedíquese unos minutos para respirar profundo, relajarse o llamar a un amigo. Cuando se sienta mejor, busque a su hijo, abrácelo y empiece de nuevo.