¡Ordenando la habitación!

Es inevitable el desorden dentro de una habitación infantil. Sin embargo, existen algunos trucos y estrategias que pueden aliviar la tarea de ordenar. Aquí les contamos algunas ideas.

La única forma de mantener un cuarto ordenado es que cada juguete tenga su lugar. Para cumplir nuestro objetivo no alcanza con tener solamente estanterías, los gaveteros, cajones, cajas y bolsas pueden resultar de gran ayuda para que cada cosa encuentre su espacio.

Una situación a la que nos enfrentamos frecuentemente a la hora de arreglar el cuarto es qué hacer con aquellos juguetes que nuestro niño ya no utiliza. Ya sea que los donemos, vendamos o los arrojemos a la basura, es recomendable incorporar en esta decisión a nuestro pequeño.

Ya los niños menores de tres años aman clasificar. Podemos aprovechar esta predisposición para proponerle un nuevo juego a nuestro hijo: “Todas tus muñecas pueden dormir en el moisés” o “Los carros parquean en el estante”. Si le hacemos participar en estas decisiones, le costará menos mantener el orden. Sin embargo, no olvidemos que los más pequeños pueden sentirse abrumados a la hora de acomodar sus pertenencias, por esto debemos esperar y respetar sus tiempos.

¿Cómo podemos crear un buen clima al ordenar? En primer lugar, es aconsejable comenzar a organizar la habitación antes que el niño se encuentre fatigado. Otra recomendación es esperar a que el pequeño termine de jugar, si lo interrumpimos puede generar conflictos. Asimismo podemos establecer un día por semana en el que se ordene la habitación y escuchar música alegre mientras lo hacemos. Cuando el pequeño acomoda algo voluntariamente podemos ponderarlo: “¡ Qué bien que guardaste todos los bloques en la caja!”

Mamis y papis, aunque parezca difícil al comienzo, nuestros niños se dan cuenta que una habitación ordenada es más linda y amplia.