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¿Qué son los brotes de crecimiento?


Daly Riguey Vásquez, Enf. Jefe Contacto de Canguro

¿Alguna vez habían escuchado este término? Los brotes o crisis de crecimiento o lactancia son momentos que presentan en las primeras etapas de la vida de un bebé y usualmente se identifican porque vemos a nuestros hijos inconformes con diversos factores como: la leche, nuestra ausencia o la comida. Pero tranquilos, estos brotes se pueden aprender a identificar, por eso Daly Riguey Vásquez, Enfermera jefe Contacto Canguro, nos explica más sobre estos procesos.

BROTES O CRISIS DE LACTANCIA

Estos procesos suelen presentarse alrededor de la misma edad en los bebes, lo que permite comprender su comportamiento y saber cómo afrontarlo.

Entre los 15 y 21 días de nacido

Alrededor de esta fecha comienzan a verse las primeras manifestaciones del primer brote de crecimiento, vemos comportamientos específicos en nuestro bebé como:

  • Llanto excesivo
  • Ganas de comer todo el tiempo
  • Necesidad de estar pegado al pecho incluso para poder dormir
  • Pellizcos al pecho, cachetes o jalones de pelo
  • Comer más de lo que puede lo que causa vomito de leche

Durante esta crisis es fácil pensar en ocasiones que el niño está enfermo, que tiene cólicos, dolor o se ha acostumbrado al brazo. Sin embargo, esto no es verdad, el niño no está enfermo y esto se puede evidenciar porque siempre quiere seguir comiendo, lo que vemos es sencillamente su reacción a las manifestaciones que está viviendo que son completamente normales. En esta edad el bebé lo que hace es preparase para el futuro ya que en una semana más o menos va a crecer, al igual que su estómago. Esto genera que el bebé produzca una sobreestimulación en el pecho para preparar una mayor producción de leche. Esta crisis dura aproximadamente una semana así que lo único que podemos hacer es tener paciencia y entender a nuestro bebé ya que luego lo veremos más tranquilo y con mucho sueño. Este es el momento perfecto para empezar nuestro banco de leche ya que nuestra producción habrá aumentado.

A las 7 semanas de vida

En este momento se presenta otro brote de crecimiento. Podemos ver comportamientos como el rechazo a la leche por parte del bebé e incluso en ocasiones se llega a creer que no le gusta el sabor de la leche que produce la mamá. Lo que sucede es que en esta época las necesidades nutricionales de ese bebé de 2 meses aproximadamente cambian y por ende la leche también cambia su composición para ajustarse a ellas, por eso es probable que el sabor de leche también haya cambiado. La recomendación es continuar con la lactancia ya que en el lapso de una semana el bebé se habrá acostumbrado al nuevo sabor y seguirá lactando.

RECOMENDACIÓN: ¡Prueba tu leche! El calostro y la leche de transición suelen ser más dulces, pero la leche que le das a tu bebé a los dos meses suele ser más simple e incluso un poco salada por el aumento de sodio.

Entre los 3 o 4 meses

La etapa en la que se suele creer que “se secó la leche” porque disminuye la producción y la mamá tiene los pechos blandos. La verdad es que esto no pasa, la leche no se seca, solo cambia su manera de producirse. Para esta época el pecho ya está entrenado para producir leche incluso estando vacío y responde a la succión del bebe después de 3 o 4 minutos; normalmente este tiempo de espera impacienta a los bebés y por eso suelen no querer tomar leche. Para evitar esto es mejor adelantarnos al llanto del bebé: cuando empecemos a notar signos de hambre mientras esta calmado debemos aprovechar la oportunidad y adelantarnos a la comida siempre teniendo en cuenta el tiempo extra de extracción de la leche.

Entre los 4 o 5 meses: crisis del sueño

Durante esta época los bebes se despiertan más por la noche, suele tener un sueño superficial y aumenta la demanda de pecho durante estas horas. Esto sucede porque su cerebro está en constante maduración y está organizando las fases del sueño. Se suele despertar sobresaltado y desubicado, lo que le produce miedo. Es usual que se suponga que el bebé se despierta porque tiene hambre, pero este NO es el caso y se debe intentar no dormirlo dándole pecho.

A los 8 meses: crisis de ansiedad de la separación

Esta etapa de identifica fácilmente porque el bebé solo quiere estar con la mamá; se levantan angustiados, llorando en plena noche, reclaman el pecho y se calman rápidamente al mamar. Esto sucede casi de manera simultánea con el gateo, lo que produce que al bebé le cueste entender el concepto de distancia y le de miedo ver a la mamá tan lejos. La manera correcta de abordar esta situación es hablando con ese bebé, explicarle que todo va a estar bien, reconfortarlo y mirarlo. Esta crisis se supera compartiendo tiempo con el niño, jugando a esconder objetos o a esconderse y despidiéndose del niño cuando lo tienes que dejar.

Entre los 12 y los 18 meses: crisis de inapetencia

En esta crisis los bebés dejan de mostrar interés por los alimentos o comen pequeñas cantidades solamente lo que hace que aumente la demanda de pecho. Los bebes a esta edad dejan de crecer a un ritmo tan acelerado y comen de manera selectiva, prefieren elementos que les dan energía rápidamente porque son muy activos y están jugando todo el tiempo. Es ideal que tu bebé no haya probado ni sal ni azúcar, así obtiene estas recargas energéticas de las frutas dulces como el banano. Lo más importante es que no lo debes obligar a comer, ofrécele diferentes cosas hasta que encuentres alimentos que le gusten, es preferible darle varias cantidades pocas veces al día ya que si lo obligas pueden generar recuerdos negativos asociados a la comida.

¿Quieres saber más sobre los brotes de crecimiento? Desde la Fundación Valle del Lili te invitamos a ver el siguiente video que aborda con mayor profundidad este tema.